El Gobierno de la Ciudad removió a los manteros de Liniers, la
novedad para por el desconocimiento del número real de personas.
Desde el oficialismo afirman que se trata de 700 vendedores,
mientras que otros sugieren que son cerca de 1200.
Cerca de 700 vendedores ambulantes que tenían sus puestos en el
barrio de Liniers recibirán la capacitación que ofrecieron las
autoridades porteñas para llegar a un acuerdo, luego del desalojo
concretado el viernes último, según informó hoy la jefatura de
Gabinete de la Ciudad de Buenos Aires.
"Hay capacidad para capacitar a 700 vendedores porque algunos
puestos eran atendidos por más de una persona", dijo hoy a la
agencia Télam el jefe de Gabinete porteño, Felipe Miguel.
El funcionario definió los cursos como un "beneficio para que los
manteros puedan incorporarse al mercado formal".
Las capacitaciones en oficios serán patrocinadas por la Federación
de Industria y Comercio de la Ciudad de Buenos Aires (Fecoba),
durante tres meses desde "fines de enero o principios de febrero".
El presidente de Fecoba Fabián Castillo informó que la organización
ya cuenta con los profesores: "Ya está todo preparado, sólo falta
que el Estado depure el listado de manteros, quienes deberán tener
el 80 por ciento de asistencia, inscribirse en el monotributo social
y no tener antecedentes penales. Cobrarán 14.000 pesos por mes".
Durante el operativo dirigido por el Ministerio de Ambiente y
Espacio Público de la Ciudad fueron desalojados 475 vendedores
ambulantes, en el perímetro delimitado por avenida Rivadavia, Carhué,
Ventura Bosch y la colectora de la avenida General Paz, una zona que
comprende 38 cuadras.
Las planificadas 240 horas de capacitación estarán divididas en
"cuatro horas diarias durante tres meses", informó Castillo, quien
agregó: "En los lugares de donde se fueron los manteros, las ventas
de los locales aumentaron un 40 por ciento".
El jefe de gabinete porteño celebró que "desde el viernes los
vecinos recuperaron las veredas como en cualquier barrio de la
ciudad" y criticó a los vendedores desalojados por "hacer
competencia desleal" a los comercios.
"Este es el primer paso, habrá una puesta en valor de la zona y se
construirá un centro de trasbordo", anunció.
Las obras del "plan de reordenamiento de Liniers", que estarán a
cargo del Ministerio de Ambiente y Espacio Público y la Secretaría
de Transporte de la Ciudad, comenzarán en mayo y serán anunciadas
formalmente "en los próximos días", anticipó Miguel, e incluirán en
teoría la incorporación de arbolado y renovado mobiliario urbano e
iluminación LED.
Una vendedora advirtió: "Tengo miedo porque el Gobierno dice que
somos 475 y somos 1200 en realidad. Yo tengo años trabajando en
Liniers, tengo miedo de que los delegados anoten a sus familiares y
gente cercana y nos dejen afuera de esos cursos".
Joselin, otra vendedora, planteó: "La mayoría son gente grande y el
curso no sirve de nada. ¿Qué haces después? ¿De qué vamos a vivir?
Tenemos que trabajar todos los días. Con 14.000 no se puede pagar
alquileres, a nadie le alcanza".
En relación a ello, un Censo realizado por el sindicato de manteros
y vendedores ambulantes reflejo que en Liniers desalojados el
viernes último, a 1150 Vendedores. Es decir, más de los 450
Vendedores que Oficialmente dijo el Gobierno de la Ciudad.
Por ello, su secretario general Omar Guaraz denuncia un fraude que
excluye a los perjudicados genuinos vendedores luego del desalojo y
a quien el Gobierno dijo incluirlos en
un censo y haber llegado a un acuerdo exitoso.
Según Guaraz “el Gobierno de la Ciudad tercerizo el censo en
particulares, donde se encuentran los punteros que recaudaban el
dinero de la coima vía la extorsión y la violencia hacia los
trabajadores de Liniers durante años y que recaudaban para las
comisarías de Liniers y el ministerio de Espacio Público. Estos
delincuentes(al igual que los funcionarios públicos que los son los
interlocutores autorizados entre los manteros de Liniers y el
Gobierno”.
En ese fuerte comunicado agrega que “la complicidad manifiesta a
llevado a un fraude de proporciones. Ante esta situación, los
centenares de trabajadores afectados por la medida que los a dejado
sin trabajo, ni la posibilidad de sus fuente de ingresos y
subsistencia, excluidos de un beneficio por un trato espurio entre
marginales se sienten a esta altura estafados y sin nada”.