Caminando por el zona, uno se puede encontrar con una fila de coches
de la extinta en 1965 marca “Autos Unión”. En la esquina de Bynon y
Gallardo, Leandro tiene su taller, y en esta nota nos hace viajar en
el tiempo usando como transporte su pasión por los motores.
¿Cuándo comenzó esta pasión?
De chiquito, me cuentan, que me gustaba sacarle las ruedas a los
autitos y desarmarlos, es una vocación nata. Antes de comenzar
jardín ya reconocía la marca de los autos. Al incursionar un poquito
más me llamó la atención los motores de los karting, y le pedí a mi
papá que me lleve a correr en todas las pistas que había para esa
modalidad en la época. Un tiempito más tarde me llegó mi primer
ciclomotor Peugeot que me regalaron mis padres, yo tenía 10 años fue
en 1973. Lo que me gustan son los motores de dos tiempos, yo soy un
especialista en ese fenómeno físico. Después hice la escuela
industrial y crecí junto con la vocación.
En materia de motor dos tiempos, ¿Sólo trabajas en auto o cualquier
vehículo?
Hasta en un helicóptero, porque esto es una especialidad. Tengo un
lugar donde guardo mis motos, que de hecho soy campeón argentino en
moto y tengo récords nacionales en ello.
En ese lugar, ¿Cuántos coches tenés?
Se van rotando, algunos son mios y otros de vecinos. Yo gestiono la
parte de chapa, la eléctrica, yo lo que hago es asesorar. No vivo de
esto.
¿Qué trabajo haces con el auto?
Lo que necesites o me pidas, algunas cosas las tercerizo y llevo a
otro especialista. A veces, lo gestiono yo eso.
¿Cuál es el modelo más antiguo que conservas?
Tengo una Cupe Ford ´47 que me compraron mis padres cuando tenía 15
años. En el garaje de mi casa empecé a reparar autos y conectarme
con gente, es un submundo.