El objetivo de la reunión fue
consolidar una agenda de trabajo junto al sector trabajador de las
pequeñas y medianas industrias de la Ciudad en el marco de la grave
crisis que afrontan, según lo que dijeron los dirigentes allí
presentes.
“La idea del encuentro es generar una mesa y empezar a trabajar en
cada uno de los problemas”, afirmó la Presidenta de la Auditoria
porteña, Cecilia Segura tras el encuentro.
Empresarios textiles, de alimentos, productores de insumos
industriales, de maquinarias, de servicios, comerciantes, de
software y de servicios educativos, entre otros, e integrantes
empresas recuperadas de la ciudad contaron, ante la atenta mirada de
los funcionarios porteños, las penurias que están viviendo.
“El brutal aumento de tarifas, la apertura de importaciones y la
caída del consumo por la baja de la actividad económica están
afectando muy fuerte a la industria, principalmente a las Pymes”,
afirmó Segura durante la reunión, y agregó: “Muchos de los
empresarios con los que hablamos nos plantearon mucha preocupación
porque si la política económica sigue este rumbo van a tener que
cerrar, y son empresas que han sido levantadas por varias
generaciones, cuentan con trabajadores muy calificados y han
desarrollado mucho su capacidad productiva en últimos años”,
completó.
Por su parte, el Defensor Adjunto, Gabriel Fuks se refirió a la
situación de emergencia por la que están pasando muchas empresas:
“Estamos trabajando en un tema que es de absoluta emergencia que es
el aumento de las tarifas y cómo está impactando en las Pymes y en
las empresas recuperadas. Hemos visto casos de empresa recuperadas
tras las crisis de 2001 a las que se les sacó el subsidio que tenían
y además les vinieron unos aumentos que han hecho imposible el pago
y en consecuencia les han cortado la luz”.
“No enorgullece habernos encontrado con empresarios pyme que tiene
la vocación de aportar al desarrollo de la producción y el trabajo
argentino y al mismo tiempo estamos muy preocupados por la situación
económica que todos estamos sufriendo pero que en particular impacta
sobre este sector que es uno de los principales generadores de
trabajo. Esto nos obliga a juntarnos y armar una agenda común para
dar respuesta”, agregó Fernando Barrera, unos de los directores del
Ente Regulador de los Servicios Públicos.
A su tiempo, el titular de Empresarios para el Desarrollo Argentino,
Leo Bilanski, manifestó su satisfacción por el encuentro: “Estamos
muy conformes porque se abrió una instancia de diálogo
institucional. Entendemos que se está creando una tormenta perfecta
en el sector a partir de las políticas que agreden nuestra
supervivencia en el mediano plazo y pensamos que el diálogo es el
camino para encontrar soluciones. Las pymes tienen centralidad
porque son grandes empleadoras de mano de obra formal, de modo que,
que las Pymes estén o no incluidas en un proyecto de país y de
ciudad cambia la matriz laboral de la sociedad”.
En el cierre, Cecilia Segura, volvió sobre la necesidad de producir
una respuesta colectiva: “La iniciativa individual para desarrollar
una empresa es muy importante pero solo es posible si existen las
condiciones sociales y económicas para salir adelante. Hay cerca de
600 mil pymes en el país, por lo tanto nuestra fuerza se hará
visible si nos juntamos, organizamos y planteamos cuestiones en
común. El discurso del “sálvese quien pueda” que pregona Macri, que
en 8 años como jefe de gobierno nunca pronunció la palabra
industria, no es una salida para las Pymes”.