Martín Ocampo, Ministro de Seguridad de la Ciudad de Buenos Aires,
explicó que tiene el gran anhelo de consolidar una fuerza
transparente, y honesta. Para ello, apuesta al vínculo con el vecino
y a la profesionalización de la nueva Policía de la Ciudad.
¿Qué balance hace de estos primeros pasos que está dando la Policía
de la Ciudad?
Hoy podemos decir que contamos con una nueva fuerza de seguridad
democrática y al servicio de la comunidad, que está realmente
presente para los vecinos en todos los barrios de la Ciudad. Son 25
mil efectivos a los que estamos dotando del mejor equipamiento
disponible, tecnología de avanzada y una capacitación permanente,
porque queremos una Policía cercana a la gente, con vocación de
servicio, transparente y honesta.
Se habló en un comienzo de la puja interna entre policías de la
Metropolitana y de la Federal, inclusive llegó a tener amenazas
hacia su persona, ¿Cuál fue su reacción?
A través de un diálogo permanente con todos los involucrados,
dejamos en claro que el traspaso en ningún caso implicaría una merma
en los derecho y evacuamos las dudas. Los puntos salientes fueron el
sistema previsional, el sistema jubilatorio, los beneficios de la
obra social, el salario y los escalafones. Asimismo, recalcamos
fuertemente que la transparencia seríar uno de los pilares de la
nueva fuerza, es decir, que íbamos a tener tolerancia cero con la
corrupción. Como parte de este cambio creamos una Oficina de
Transparencia y Control Externo, que recibe las declaraciones
juradas de los policías y asume las tareas de lo que antes se
denominaba “Asuntos Internos”. Lo destacado de esta oficina es que
está a cargo de civiles. Quedó atrás la época en la que los policías
eran controlados por policías.
Se viralizó no bien se dio esta unión, a un grupo de suboficiales
que en clara alusión a presionarlo, viralizaron un video en el que
arrojaban un petardo a una foto suya. ¿Qué medidas se tomó para con
los que participaban en el video?
Si bien se trató de un incidente aislado, fue realmente
lamentable.En primer lugar, los agentes involucrados fueron
inmediatamente separados de sus cargos y se les inició un sumario
administrativo por falta de sujeción al régimen disciplinario.
Además, los denuncié ante la Justicia por amenazas y daño
calificado. Entiendo que quedó claro que no vamos a permitir ningún
tipo de intimidación, y que seremos intransigentes con estas
acciones. Y si eso implica ponernos firmes, eliminar antiguos
privilegios y ponerle el cuerpo al cambio, estamos dispuestos a
hacerlo.
¿Cuál es la postura que adoptan ante los casos de corrupción que
involucraron a miembros de la cúpula de la nueva fuerza?
Nuestra postura frente a la corrupción, en cualquier escalafón de la
fuerza, es tajante: tolerancia cero. Como primera medida sacamos a
las brigadas de las comisarías, hoy todas las brigadas dependen de
la Superintendencia de Investigaciones. A su vez, decidimos que
todos los años van a cambiarse los comisarios. Es decir, que va
haber migraciones todo el tiempo. Porque detectamos que el anclaje
continuo de las mismas personas a un territorio de gestión generaban
vínculos y situaciones que no ayudaban a generar mecanismos de mayor
transparencia. Todo esto quiere decir que frente al primer indicio
de que se esté cometiendo, o se haya cometido, algún ilícito, no nos
va a temblar el pulso para apartar de su cargo a quien tengamos que
apartar respetando la ley y los procedimientos correspondientes.
Una crítica del porteño hacia las fuerzas de seguridad es la falta
de patrulleros, de personal, de trabajo territorial, que son
cuestiones que se arrastran desde hace años. Hoy en día, ¿Cree que
la Policía de la Ciudad cuenta con los recursos para suplir ese
reclamo?
Justamente una de nuestras prioridades es dotar a la Policía de la
Ciudad con todos los recursos humanos, el equipamiento y la
tecnología para brindar un servicio eficiente y de calidad. En
primer lugar incorporamos civiles en las comisarías para que
realicen el trabajo administrativo que antes hacían los agentes. Eso
nos permitió contar con más policías en la calle, a los que también
les brindamos nuevos chalecos, uniformes e instrumentos de
seguridad. Además, aumentamos la cantidad de patrulleros, motos,
camiones y cuatriciclos a disposición de la fuerza, a los que
equipamos con tecnología de punta: cámaras 360, sistema GPS, equipos
de comunicaciones, computadoras. En consecuencia, tenemos más
capacidad de realizar controles, allanamientos y operativos en toda
la ciudad, de forma coordinada y con velocidad en la respuesta.
¿Cómo se capacitan los efectivos?
Todos los efectivos, tanto los de mayor antigüedad como los nuevos
reclutas, se capacitan en el Instituto Superior de Seguridad
Pública. Es un centro académico y de investigación de primer nivel
ubicado en Villa Soldati. Allí, los oficiales se forman en la
práctica profesional con cursos teóricos y prácticos, en el uso de
elementos de seguridad, cuentan con simuladores de autos y motos
para aprender a manejar en situaciones de riesgo, y hasta tienen
acceso a una escuela de canes. Además, hicimos de la formación
permanente un requisito imprescindible para acceder a un ascenso
–incluyendo exámenes físicos, psicológicos y de aptitud-. Nuestra
política es que el crecimiento profesional tiene que estar
acompañado de una capacitación cada vez mayor.
¿Qué tipo de forma delictiva es la que se da en mayor medida en la
Ciudad según índices que manejan en el Ministerio, o cantidad de
denuncias recibidas en las comisarías?
Los ilícitos que más se registran son en general robos, en sus
distintas modalidades. En segundo lugar hurtos, es decir que no
implican un uso de la fuerza contra la víctima. Y en tercer lugar
lesiones, por ejemplo de riñas.
¿Existe trabajo en conjunto con su par de Seguridad en Nación?
Por supuesto, nuestra tarea indefectiblemente requiere que
trabajemos de forma conjunta tanto con las autoridades de Seguridad
de la Nación como de la provincia de Buenos Aires. Los delitos no
reconocen fronteras entre jurisdicciones y eso es algo que vemos
permanentemente. El control conjunto a través del Anillo digital en
los accesos y egresos de la Ciudad, es apenas una muestra. Trabajar
en equipo no sólo es una obligación, sino también una necesidad
estratégica. Afortunadamente tenemos un excelente vínculo tanto con
la Ministra Bullrich como con el Ministro Ritondo, ya que los tres
estamos haciendo nuestro mejor esfuerzo por brindar cada vez mayor
seguridad a la gente, y dar forma a fuerzas policiales transparentes
y que rindan cuentas frente a la sociedad.
¿Por qué se creó el plan Comisarías Cercanas?
Comisarías Cercanas es una iniciativa pensada para escuchar las
inquietudes de los vecinos con respecto a la seguridad, a través de
reuniones en las comisarías los primeros jueves de cada mes. Lo
implementamos porque nos parece que es fundamental que la gente nos
acerque sus reclamos y sugerencias, y que haya un contacto más
directo con la Policía. Y la realidad es que notamos que con estos
intercambios logramos mejorar la seguridad de los barrios, porque
son los vecinos los que, junto a la Policía, detectan las
necesidades más importantes de cada zona. Por eso, son reuniones en
las que más que para hablar vamos a escuchar. Esto nos sirve además,
para confeccionar un Mapa del Delito.